José Manuel Sánchez Fornet, secretario general del SUP, dijo a Servimedia que la protección de las mujeres amenazadas es, en la práctica, difícil, puesto que "si hay uno que quiere matar al otro es muy complicado evitarlo".

No obstante, Sánchez Fornet señaló que podría ayudar que se destinase más dinero para poner en práctica sistemas de protección como el de la pulseras electrónicas, que permite detectar cuando un potencial agresor se acerca a su víctima.

A este respecto, indicó que hacen falta los "recursos necesarios" para atender una emergencia de estas características, de manera que se pueda enviar agentes a detener al posible agresor.

Al mismo tiempo, el SUP planteó que también podrían utilizarse a los agentes en segunda actividad para crear un sistema de "contravigilancia" en los barrios donde hay mujeres amenazadas, de manera que se pudieran evitar las agresiones.