En la misma línea se pronunciaron el portavoz de Izquierda Unida en el Congreso de los Diputados, Enrique Santiago, y la portavoz adjunta primera de Sumar y parlamentaria de los Comunes, Aina Vidal; el primero en declaraciones a los periodistas tras reunirse junto a otros electos de Sumar con la asociación propalestina Samidoun y la segunda en rueda de prensa en la Cámara Baja.

Santiago tachó de “absolutamente inaceptable la actitud de la derecha española”, de la que dijo que “nunca ha sido democrática” y ahora promueve, con las manifestaciones ante las sedes del PSOE, “unas actitudes propias de somatenes ultraderechistas”. “La derecha española está intentando incendiar esta sociedad porque no aceptan la realidad”, enjuició, “y está intentando evitar que se pueda realizar una sesión de investidura para que otra mayoría democrática pueda ayudar a que se configure ya Gobierno en nuestro país”.

A ello añadió “la actitud de ese partido judicial”, con el pronunciamiento del Consejo General del Poder Judicial contra la amnistía, la imputación por terrorismo a Puigdemont y la dirigente de ERC Marta Rovira por el juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón, entre otras iniciativas. El CGPJ, denunció, “sin tener competencias para ello emite acuerdos sobre un anteproyecto de ley que no existe” y “lo que hace es criticar al presidente del Gobierno en funciones y establecer que no es democrático que gobierne alguien diferente al Partido Popular”. En cuanto a García Castellón, dijo que “es sorprendente que, justo el día que está intentando cerrarse el acuerdo de investidura, sea cuando se da este paso tan peculiar”.

“Yo no creo en esas coincidencias”, afirmó. “Creo que ha habido mucho tiempo para que la Audiencia Nacional hiciera ese trabajo y que tampoco era imprescindible hacerlo la misma semana que se está intentando cerrar el acuerdo de gobierno; es decir, tiene una clara intencionalidad política”. De todo ello concluyó que “se contribuye de alguna forma a la desestabilización; como decía el señor Aznar, cada uno que haga lo que pueda. Pues aquí todo el mundo está haciendo lo que puede”.

Por su parte, Vidal interpretó que “la derecha sigue utilizando a los altos tribunales con tal de socavar la democracia y torpedear la investidura, incitando a una rebelión”, y recordó también las palabras de Aznar: “El que pueda hacer que haga y el que pueda aportar que aporte”. Recordó el bloqueo del CGPJ llamando a retomar la reforma de las mayorías para elegir a sus vocales. Sobre las manifestaciones, subrayó que había “gente haciendo loas a Franco” y personas condenadas por "pertenecer a organizaciones neonazis” o por el asalto a la librería Blanquerna.

Ambos diputados propusieron “calma y tranquilidad” para hacer frente a esta supuesta ofensiva doble de la derecha y se declararon convencidos de que, pese al intento de crear crispación y alarma social por el pacto de investidura, presionando al PSOE y a la base social de los partidos independentistas que ven la supuesta represión del Estado, ésta terminará saliendo adelante.