Sin embargo, la propuesta ha chocado con l negativa de la oposición conservadora, que, aunque está a favor de la baja parental, opina que es la familia, y no el Parlamento, quien debe decidir sobre cómo organizarse para cuidar a los hijos.

Suecia cuenta con larga experiencia en medidas para permitir que ambos padres disfruten de sus hijos durante los primeros años. Actualmente, los padres cuentan con 10 días de baja laboral pagadas después del nacimiento de un hijo, además de un período de baja parental de 450 días. Durante 12 meses, un trabaador recibe el 80% de su sueldo y esos días, que pueden dividirse entre los padres y las madres, pueden tomarse en cualquier momento hasta que el niño cumpla los ocho años.

Como la mayoría de las veces los hombres cedían sus días de baja a las madres, el Gobierno introdujo en 1995 el llamado "mes del padre": 30 días que los padres no podían transferir a las madres.