Todo ocurrió durante un acto en el Pabellón Municipal de Deportes de Santa Cruz de Tenerife ante unas 2.000 personas, que acudieron para arropar a Mariano Rajoy en su primer acto de campaña en las islas Canarias.

Por razones de horario, se modificó el orden de las intervenciones, de manera que Mariano Rajoy tomó la palabra casi al inicio y el presidente regional del PP, José Manuel Soria, puso el broche con un discurso en el que, nada más empezar, arremetió contra Zapatero a cuento del debate.

"Zapatero ha suspendido dos o tres actos porque dice que tiene que estudiar", sentenció en un tono despectivo. "Ahora, a estas altura, tiene que ponerse a estudiar. Debería saber que lo que uno no ha estudiado en cuatro años, en cuatro días no se aprende".

El comentario de Soria llegó apenas minutos después de que la Oficina de Información del PP confirmara a la caravana de periodistas que cubre la campaña electoral de Rajoy la suspensión del mitin previsto para el viernes en Vitoria y el cambio de hora de otro el jueves en Alicante.

Ni corto ni perezoso, Soria prosiguió con la descripción ridiculizante mientras Rajoy, sentado en primera fila, le escuchaba atentamente. "Como ha suspendido dos o tres actos, tienen que mandar a sus ministros, pero ha mandado a todos sus ministros menos a uno, a (Mariano Fernández) Bermejo", agregó.

Soria pasó de la mofa a la broma al señalar que Bermejo está en un segundo plano durante toda la campaña porque "está con la brocha en la mano", ya que el presupuesto que tenía para reformar su piso oficial "no le llegó para pintura" pese a gastarse 220.000 euros.

"Cuando uno tiene la brocha en la mano, corre el riesgo de que se le caiga el andamio y se quede colgado, que es lo que le va a pasar a Zapatero y a Bermejo el 9 de marzo", añadió a modo de conclusión.