SOLO LA MITAD DE LOS GRANDES HUMEDALES ESPAÑOLES ESTAN INCLUIDOS EN EL CONVENIO INTERNACIONAL RAMSAR, SEGUN SEO/BIRDLIFE
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La Sociedad Española de Ornitología (Seo/BirdLife) ha catalogado en España 77 zonas húmedas que cumplen los criterios necesarios para quedar incluidas en el Convenio Ramsar sobre humedales de importancia internacional, aunque sólo 38 de ellos están amparados poreste tratado.
La organización conservacionista considera que la Bahía de Cádiz, las lagunas gaditanas y la desembocadura del Mijares deben engrosar con urgencia la lista de humedales Ramsar.
Ramsar es la ciudad iraní donde en 1971 se firmó el tratado internacional para conservar los humedales de todo el mundo. Seo/BirdLife fue la única organización no gubernamental española que asistió a las conferencias y aportó su experiencia para consolidar este acuerdo.
En la acualidad, 114 países, que aortan 970 zonas húmedas con uan extensión total superior a los 70 millones de hectáreas, se han adherido a este convenio.
Esta semana se celebra en Costa Rica la séptima conferencia del Convenio Ramsar. Coincidiendo con esta reunión, Seo/BirdLife quiere impulsar la protección de zonas húmedas proponiendo mejoras en los sistemas de gestión, y aportando como ejemplo los modelos aplicados en algunos humedales mediterráneos.
La organización conservacionista presentará a la reunión el informe "Humedals del Mediterráneo", editado en colaboración con la Caja del Mediterráneo"
Los países mediterráneos aportan 112 zonas a la lista Ramsar, que suman un millón y medio de hectáreas. De ellas, 19 están incluidas en el denominado "Registro Montreux", que engloba a espacios con problemas peculiares y diferenciados. En este registro están incluidos Doñana y las Tablas de Daimiel.
No obstante, el director de Seo/BirdLife, Alejandro Sánchez, declaró hoy, en rueda de prensa, que Doñana constituye un buen mdelo de gestión de zona húmeda. Por el contrario, el Delta del Ebro presenta deficiencias importantes.
Sánchez señaló que la presión humana, agravada por el turismo, constituye una de las principales amenazadas para las zonas húmedas en el Mediterráneo.
Asimismo, la intensificacón de la agricultura, la extracción abusiva de aguas subterráneas y la contaminación de acuíferos con pesticidas y fertilizantes suponen un peligro para estos ecosistemas.
(SERVIMEDIA)
12 Mayo 1999
GJA