SOLO UN INCIDENTE ANTE LA SEDE DE LA DELEGACION DEL GOBIERNO ENTURBIO LA NORMALIDAD DE LAJORNADA DE HUELGA EN SANTANDER
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Un violento enfrentamiento, a primeras horas de esta mañana ante la sede de la Delegación del Gobierno en Santander entre la policía y un piquete informativo, fue la excepción a la jornada de huelga vivida en la capital cántabra que, por lo demás, discurrió con toda normalidad.
El altercado entre los policías y el piquete informativo compuesto por más de 200 personas concluyó con un saldo de tres heridos de carácter leve, dos detenids y numerosos contusionados.
La jornada de huelga vivida hoy en Cantabria, que fue seguida por el 95 por ciento de los trabajadores, según los sindicatos y por el 50 por ciento, según la delegación del Gobierno, se ha desarrollado, a excepción de ese incidente, con normalidad en toda la región.
El suceso se desencadenó cuando el numeroso piquete informativo llegó a las inmediaciones de la sede de la Delegación del Gobierno, bajo una fuerte vigilancia policial, cuando recorrían las calles de la caital cántabra repartiendo flores entre los ciudadanos que acudían a sus puestos de trabajo para pedirles solidaridad con la huelga.
Sin previo aviso y sin provocación alguna, según los sindicatos, las fuerzas de orden público arremetieron con contundencia contra los concentrados y golpearon incluso a varios reporteros gráficos que cubrían la marcha. Asimismo, algunos traseuntes ajenos al piquete formado por los sindicatos fueron también agredidos.
El delgado del Gobierno en Cantabria, Antonio Palarés, justificó la acción policial afirmando que los huelguistas estaban cortando el tráfico rodado en la ciudad, mientras que algunos agentes del Cuerpo Nacional de Policía señalaron que varios huelgistas les insultaban.
Ese grave incidente, calificado así por los sindicatos, se saldó con el traslado hasta el hospital Marqués de Valdecilla de tres heridos leves, todos ellos militantes de UGT, y la detención de dos piquetes de CCOO, al tiempo que numerosas personas resultaron contusionadas en diversaspartes del cuerpo y algunos reporteros gráficos sufrieron daños en sus equipos.
Tras la carga policial, los concentrados comenzaron a proferir gritos contra el delegado del Gobierno como "Pallarés, Pinochet", "Pallarés, tienes que estar orgulloso. Tus chicos se han portado bien" o "Estamos aquí porque nos da la gana".
Algunos agentes, que intervinieron en el altercado, manifestaron que la orden que habían recibido fue la de dispersar la concentración como fuera, mientras que le delegado del Gobieno afirmó en conferencia de prensa al finalizar la huelga, que la intervención policial se tenía que haber producido mucho antes.
Los secretarios regionales de CCOO y UGT, Venancio Diego y Luis Angel Ruíz, pidieron la dimisión de Antonio Pallarés al que calificaron de "impresentable" y "personajillo".
Por último, unos 300 trabajadores de la empresa Solvay, ubicada en Torrelavega, recorrieron a pie los 26 kilómetros que separan esta localidad de Santander, a donde llegaron para entregar dos escrits, uno al delegado del Gobierno y otro al presidente cántabro, en los que instaban a las dos administraciones a que tome medidas para solucionar los problemas que afectan a la factoría.
(SERVIMEDIA)
28 Mayo 1992
J