Este trabajo, elaborado entre julio y septiembre de 2006 a partir de 22.000 datos de conductores y pasajeros de 22 ciudades de España, alerta del peligro de este bajo uso. Según explicaron ambas asociaciones en un comunicado, la probabilidad del fallecimiento de los ocupantes delanteros aumenta un 20% en el caso de que los viajeros de las plazas traseras no lleven cinturón.

En el caso del conductor y el copiloto, el trabajo destaca un uso "mayoritario" de este elemento de seguridad, con un 86% y 84%, respectivamente, en carretera, y un 75,4% y un 76,3% en ciudad.

Los resultados de este informe revelan también que la mujer es más "responsable" que el hombre a la hora de protegerse en el vehículo, con un 89,3% de uso, frente al hombre, con un 78%.

El estudio también se ha fijado en el uso del cinturón por tipo de vehículo. Los conductores de turismo utilizan este sistema en un 86,9%, frente al profesional del taxi, que lo usa en un 34%. En el caso del todoterreno, un 83,5% de los conductores van sujetos, frente a un 69,5% de los conductores de furgonetas.