SOLO UN 10% DE LAS MUJERES INTERESADAS LOGRO ENTRAR EN EL EJERCITO DESDE QUE LES ABRIO SUS PUERTAS

MADRID
SERVIMEDIA

Sólo un diez por ciento de las mujeres que solicitaron formalmente entrar en las Fuerzas Armdas consiguió su objetivo, según datos del Ministerio de Defensa correspondientes al periodo que va desde 1992, año en que se permitió la entrada de mujeres en tropa y marinería profesional, hasta 1998.

En ese periodo, un total de 35.853 mujeres pidieron ingresar en el Ejército, pero sólo lo lograron 3.962, según una respuesta del Gobierno a la diputada de Iniciativa per Catalunya Mercé Rivadulla, a la que tuvo acceso Servimedia.

Porcentualmente, Madrid es la provincia donde más mujeres solicitarn su ingreso en las Fuerzas Armadas, con el 15,4% del total de peticiones. Después se situaron las mujeres valencianas, con el 5,4% y, por detrás, las de Sevilla (4,8%) y León (4,0%).

Las provincias donde menos se interesaron las mujeres por entrar en el Ejército, con porcentajes inferiores al uno por ciento, fueron, por orden decreciente, Palencia, Baleares, Huelva, Ceuta, Lugo, Melilla, Cuenca, Tarragona, Alava, Avila, Logroño, Huesca, Guadalajara, Girona, Castellón, Segovia, Navarra, Guipuzcoa, Terel, Soria y Lleida.

El Ministerio de Defensa mantiene que la incorporación de la mujer al Ejército no ha acarreado problemas graves de integración, y no ha resultado necesario establecer programas específicos para fomentarla porque el número de mujeres que concurre a las convocatorias es cada vez mayor.

Según estos datos, un 22 por ciento de las peticiones cursadas en la segunda convocatoria de este año para ingresar en las Fuerzas Armadas como profesional en la categoría de tropa y marinería coresponde a mujeres.

Entre las medidas aprobadas para permitir esa integración, destaca la eliminación de la gestación de la tabla de causas de exclusión en los procesos de selección. Las únicas diferencias por razón de sexo que pueden existir en las pruebas, asegura el Ministerio, son las "derivadas de las distintas condiciones físicas que, en su caso, puedan considerarse en el cuadro de condiciones exigibles para el ingreso".

Tan sólo en los requisitos para ocupar determinados destinos se pueden ncluir límites de edad o condiciones psicofísicas especiales, pero no se permite la distinción por razón de sexo.

A pesar de todo, en los últimos años se han producido cinco denuncias por acoso sexual en el seno del Ejército, cuatro de ellas en 1998. Dos de los casos han concluido con sanción, en otros dos se ha decretado el pase a la situación de suspenso en funciones con cese en el destino, y otro se encuentra bajo diligencias previas por el Juzgado Togado Militar.

La incorporación de la mujerlas Fuerzas Armadas se inició en 1988, al permitir su acceso a militar de carrera. Este paso inicial se completó en 1992, cuando el acceso se amplió a la clase de tropa y marinería profesionales.

(SERVIMEDIA)
10 Jul 1999
CLC