Discapacidad

Sólo el 1,7% de contratos de 2022 fueron para personas con discapacidad pese a representar el 6,3% de la población

- Según datos del SEPE, que señalan que la contratación indefinida se disparó un 178% pero sigue siendo minoritaria

- Sólo el 8% de los afiliados a la Seguridad Social con discapacidad son autónomos frente al 16% de la afiliación general

MADRID
SERVIMEDIA

Sólo el 1,72% de los contratos de trabajo formalizados en 2022 se suscribieron con personas con discapacidad, pese a que esta parte de la ciudadanía constituye el 6,31% de la población en edad de trabajar en España.

Así se desprende de un informe del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) que anualmente analiza la situación laboral de las personas con discapacidad a partir de datos propios y de cifras de organismos como el Instituto Nacional de Estadística (INE) o de la Seguridad Social.

Cuantitativamente, de los 18.310.343 contratos de 2022, 314.948 fueron suscritos con personas con discapacidad, experimentando un incremento del 2,29% con respecto al ejercicio anterior. El dato contrasta con la caída del 5,67% que se produjo en la contratación de personas sin discapacidad.

El estudio recuerda los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) que reflejan que, existe una gran diferencia en la distribución por sexo de la población con discapacidades. En 2021 (últimos datos disponibles), el 56,81% fueron hombres y el 43,19% mujeres. Frente al 6,31% total, hay un 71,8% de hombres con discapacidad en edad de trabajar y un 5,45% de mujeres.

Del 6,31% de la población en edad de trabajar que suponen las personas con discapacidad, el mayor porcentaje se concentra en el grupo de edad de los 45 a los 64 años, siendo el menos numeroso el de 16 a 24 años.

Atendiendo a su distribución territorial, son cuatro las comunidades autónomas en las que la población de personas con discapacidad supera el 10% del total. A la cabeza se sitúa Andalucía, donde se ubica el 19,6% del total. Le siguen Cataluña (16,9%), Comunidad de Madrid (10,6%) y Comunidad Valenciana (10,3%).

Del total de contratos de personas con discapacidad, el 59,42% se formalizaron con hombres y el 40,58% con mujeres. La proporción está algo alejada de la registrada en el conjunto del mercado de trabajo, donde el reparto fue del 53,87% para hombres y del 46,13% para mujeres. No obstante, el aumento de la contratación entre las mujeres (+5,66%) fue mayor que entre los hombres (+0,11%).

SECTORES

Como ocurre en el mercado laboral en su totalidad, el sector terciario es también el que más contratación registra, pero con un peso diez puntos superior, del 81%, entre las personas con discapacidad. Por el contrario, los contratos en agricultura y construcción son proporcionalmente menores en este colectivo que en el resto de la población. En 2022, la contratación de personas con discapacidad cayó en todos los sectores salvo en servicios.

Las actividades que registran un mayor número de contratados a personas con discapacidad son Servicios a edificios y actividades de jardinería (56.212 personas); Actividades administrativas de oficina y otras actividades auxiliares a las empresas (25.296) y Actividades de servicios sociales sin alojamiento (20.474).

En este sentido, la tasa de contratación más elevada en este último año en el colectivo de personas con discapacidad se registra en la ocupación de Empleados de venta de apuestas, con el 66,69% de personas con discapacidad sobre el total de los contratos en dicha ocupación, seguida de máquinas de lavandería y tintorería con un 28,23% y Conserjes de edificios, con el 13,44%.

Por tipo de discapacidad, en el 40% de los contratos no se especifica. Pero, de los 187.671 en los que sí aparece el tipo de discapacidad, el 43,14% tiene reconocida alguna discapacidad física, el 10,53% psíquica, el 5,53 % sensorial y el 0,39% del lenguaje. Únicamente en la categoría psíquicas ha aumentado la contratación en ambos sexos respecto a 2021, según el SEPE.

TIPO DE CONTRATOS

En el tipo de contratación, el informe destaca los efectos de la reforma laboral, en vigor desde el 1 de enero de 2022, que causan un incremento del 178% de la contratación indefinida entre las personas con discapacidad y una caída del 21% en la contratación temporal. No obstante, estos contratos todavía representan un 68,7% de la contratación de las personas con discapacidad (216.433), de los cuales 116.768 fueron por circunstancias de la producción (+16%).

De hecho, esta modalidad representó la contratación más frecuente (37%), seguida por el Indefinido ordinario -bonificado/no bonificado- (17%), sumando ambas modalidades más de la mitad (54%) de la contratación de las personas con discapacidad.

Con referencia a la jornada laboral, fue completa en el 56,39% (-4 puntos respecto a 2021) de los contratos frente a la parcialidad del 35,7%. El 7,9% restante tuvo la condición de fijo discontinuo frente al apenas el 0,89% que representaban el año pasado.

Respecto al índice de rotación, que permite conocer el número de contratos que una persona suscribe a lo largo del año, se situó en 1,97 contratos para las personas con discapacidad frente a al 2,39 de personas sin discapacidad, tendencia que se mantiene a lo largo de los años.

DESEMPLEO

Dentro del conjunto de demandantes de empleo, las personas con discapacidad suponen el 4,97%, unas 140.987 personas. La cifra ha mantenido una trayectoria ascendente en los últimos años, salvo durante la pandemia, y ahora es 0,3 puntos superior al registro de 2021.

Al contrario de lo que ocurre en la contratación, en las personas paradas son mayoría las mujeres (53,55%), si bien la brecha es menor que entre las personas que no tienen ninguna discapacidad, en el que las mujeres representan un 59,8% de los parados. El descenso del paro entre el colectivo fue del 2,72%, inferior a la caída del 8,93% que se produjo entre las personas sin discapacidad.

El informe alerta de que la incidencia del paro de larga duración, que se pronunció a raíz de la pandemia, es mayor entre las personas con discapacidad. Aunque ha caído un 16% interanual, la tasa es del 54,9%, lo que significa que 77.344 personas con discapacidad paradas llevan más de un año registradas en las oficinas del SEPE. Entre los que no tienen discapacidades, los parados de larga duración no alcanzan el 42%.

AFILIACIÓN

Por otra parte, España cerró 2022 con un total de 20.159.317 personas afiliadas a la Seguridad Social. De ellas, 315.850 eran personas con discapacidad, lo que supone que este colectivo representa el 1,57% del total (1,51% en 2021). Supone, además, un crecimiento interanual del 6,77%, siendo casi tres puntos superior al aumento medio de todas las afiliaciones, que en el conjunto nacional es del 3,9%.

De nuevo, casi el 60% de los afiliados con discapacidad son hombres y poco más del 40% mujeres, lo que muestra una brecha de género más acusada que en el caso de la afiliación en general (52,86% y 47,14%, respectivamente).

En cuanto al régimen de cotización, en las personas con discapacidad, más del 90% se encuadran dentro del Régimen General, cuando en la afiliación total no llegan al 80%. Por su parte, los autónomos superan el 16% en la afiliación general mientras que en el colectivo de personas con discapacidad no alcanza el 8%, por debajo del 10,4% del año anterior.

(SERVIMEDIA)
15 Mayo 2023
JMS/pai