SOLE TURA ABOGA POR LA COORDINACION CULTURAL ENTRE GOBIERNO Y AUTONOMIAS, "POR ENCIMA DE INTERESES POLITICOS"

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Cultura, Jordi Solé Tura, destacó hoy la necesidad de coordinación entre la Administración central y las comunidades autónomas en materia cultural. "Una cooperación institucional, por encima de intereses políticos, es el único mecanismo que nos permitirá avanzar", indicó.

En su comparecencia ante la Comisión arlamentaria de Educación y Cultura, Solé Tura afirmó que "ninguna administración autonómica o local está en condiciones de solucionar en solitario sus problemas en este sentido".

Se refirió también a la necesidad de fomentar la colaboración entre el sector público y el privado, dado que la industria cultural es un sector de riesgo en el que el beneficio no debe ser el móvil.

"El papel del Estado en materia cultural no debe ser subsidiario, pero tampoco dirigista, y en ese equilibrio radica la fución de mi ministerio, que debe favorecer la creación de programas pero no caer en la tentación de ser el único ni el principal gestor", dijo Solé Tura.

"AL-ANDALUS"

En torno al intervencionismo del Estado en las actividades culturales, el diputado del PP Andrés Ollero preguntó al ministro sobre la exposición "Al-Andalus: Las artes islámicas en España", que se celebrará en Granada el año próximo, organizada y dirigida por el Metropolitan Museum de Nueva York y financiada por el Banco Bilbao Vizcaya,sin la aparente participación del Ministerio de Cultura.

El ministro advirtió que el citado museo cuenta con unos fondos excepcionales y fue el artífice de la exposición, en la que la Administración española ha intervenido para facilitar trámites. "En el 92 vamos a tener en Granada una gran exposición sin que eso le suponga un enorme gasto al Estado, por lo que damos por bien empleada nuestra participación en ese proyecto", dijo.

Aseguró que la aprobación de la Ley de Mecenazgo, destinada a incenivar la actividad cultural de las instituciones privadas, está sufriendo un cierto retraso porque su departamento quiere garantizar que no se convierta en una fórmula para la evasión fiscal.

Acerca de las inversiones del ministerio, que en opinión del portavoz de CiU, Josep López de Lerma, descuida a la Comunidad Autónoma de Cataluña, Solé Tura afirmó que "aunque soy uno de los catalanes del Gobierno no soy el ministro para Cataluña, y los fondos deben distribuirse equitativamente".

La proyecciónexterior de la cultura española, que actualmente se traduce en grandes proyectos europeos, también debe atender, en opinión del ministro, a otras áreas, como el Mediterráneo, Iberoamérica y los países del Este, que requieren un gran interés.

OCULTACION DE PROVEEDORES

Por su parte, el portavoz del PP en la comisión parlamentaria, Miguel Angel Cortés, acusó al ministerio de intentar omitir los datos sobre sus proveedores en las últimas adquisiciones de obras de arte, que en su opinión deberían ser debdamente fiscalizados.

"Se amparan en el derecho a la intimidad de los dueños para ocultar sus identidades, y en cambio han tratado hace poco de exigir que todos los ciudadanos declarasen hasta la última cucharilla de plata que tuviesen, a través de la Ley del Patrimonio", señaló Cortés.

Solé Tura argumentó que la intención de su departamento no había sido la ocultación, sino que habían solicitado la asesoría del Consejo de Estado sobre la conveniencia de divulgar los datos de la procedencia de ess obras.

DEBATE POPULAR SOBRE EL PRADO

Sobre la ampliación del Museo del Prado, tanto el ministro como los portavoces de los distintos grupos parlamentarios coincidieron en la necesidad de desarrollar un debate popular para decidir este asunto, que afecta a la política museística de toda España, dado que muchos museos provinciales se nutren de los fondos de la primera pinacoteca nacional.

En el terreno audiovisual, Solé Tura señaló el progreso que ha supuesto el cambio de actitud del ministerioen la concesión de subvenciones a la cinematografía, que antes se daban para la producción y ahora se otorgan a las películas ya producidas, con lo que se favorece el incremento de productoras.

Respecto a la cooperación en política audiovisual con otros países europeos, el ministro mostró su preocupación por la posibilidad de que "seamos fagocitados por nuestros socios comunitarios, cuyas industrias están mucho más desarrolladas que la nuestra".

(SERVIMEDIA)
08 Mayo 1991
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