Según explica la cadena hotelera en un comunicado, la inversión destinada a sostener este Plan Estratégico es de 1.100 millones de euros en terrenos, construcción, hoteles y cadenas hoteleras.

Dicha cuantía será financiada íntegramente con recursos de caja generados por la compañía. La inversión se repartirá entre actuaciones destinadas a potenciar el valor de marca y a financiar la política de expansión.

Por ello, junto a estas inversiones, Sol Meliá prevé una inversión de 120 millones de euros en tres años para la ejecución de una ambiciosa política de comunicación y publicidad destinada e incrementar en todos los mercados el nivel de reconocimiento de marca.

Para poder hacer frente a un desarrollo de esta magnitud, Sol Meliá ha iniciado un proceso de reorganización, prácticamente concluido, que se fundamenta en que las distintas responsabilidades de negocio se estructuran en torno a las diferentes marcas.

Otras claves serían la mayor eficiencia interna que permitirá la creación de un Centro de Servicios Compartidos para las funciones de "back-office" de toda la compañía, y la implantación de un nuevo estilo y cultura empresarial propiciada por el relevo generacional en la cúpula de la organización.