Las funciones de esa sociedad estatal, que fue creada por la Ley de Puertos del Estado, seguirán siendo, al igual que cuando era un departamento más de la Dirección General de la Marina Mercante, la prestación de servicios de búsqueda y rescate, el control del tráfico y la lucha contra a contaminación marítima.

Sin embargo, según Alvarez Díaz, el objeto de su creación es tener mayor capacidad de gestión y autonomía para actuar más rápidamente en los casos de rescate de la tripulación de embarcaciones siniestradas así como la limpieza de las aguas y playa en los casos de contaminación.

La Sociedad Estatal de Salvamento Maritimo está regida por un consejo de administración compuesto por autoridades del Ministerio de Obras Públicas y Transportes y su presidente es el director geneal de Marina Mercante, Rafael Lobeto.

Esa entidad de derecho público cuenta para cumplir sus funciones con los centros de control de tráfico marítimo y coordinacion de salvamento de Tarifa (Cádiz) en el Estrecho y el de Finisterre (Galicia), y este mismo mes se inaugura otro en Barcelona, en la misma sede de la Capitanía Marítima de la Ciudad Condal.

Además, la Sociedad Estatal dispone de 11 buques de altura, 14 lanchas de intervención rápida, dos helicópteros, y con cuatro embarcaciones de limpiza de aguas portuarias y costeras, que deben de atender a las límites marítimos asignadas el Estado español, unas tres veces el territorio nacional.

El total de la inversión prevista durante este año y el próximo para nuevos centros con los que se consiga una cobertura de todo el litoral español ronda los 4.200 millones de pesetas, incluida la obra civil y los equipos necesarios para llevar a cabo su labor.

A lo largo de 1993, entrarán en funcionamiento dos nuevos centros regionales, uno en Gijón especializado en la lucha contra incendios y en la formación profesional de los trabajadores, y otro en Tenerife, y un centro local más en La Coruña. En 1994 se abrirán los de Bilbao, Almería y Valencia.