Sin embargo, los delitos en materia de ruido, humos, vertidos al alcantarillado, actos de vandalismo en zonas verdes, el número de excrementos caninos y la suciedad en las calles aumentan de forma notable. El edil socialista responsable de esta área, Pedro Santín, denuncia que "cada vez se cometen más infracciones y, sin embargo, se sanciona menos".

El Gobierno de Gallardón aprueba nuevas normas a las que da gran publicidad, como la Ordenanza contra el ruido o la de Evaluación Ambiental. "Todo esto estaría muy bien", argumenta Santín, si se llevara a efecto. Mientras ni se cumpla ni se haga cumplir, sólo es papel mojado". En este momento existe en la ciudad una casi absoluta impunidad ambiental, debida sobre todo a la falta de medios de la Patrulla Verde, señala.

CONTAMINACION ATMOSFERICA Y ACUSTICA

El aspecto en el que más ha disminuido el número de sanciones impuestas es el relativo a las infracciones por humos y emisiones contaminantes, que se han reducido en 2004 en un 61% respecto a 2003 (se ha pasado de 360 a 140 sanciones). Esta impunidad tiene mucha relación con los niveles de contaminación atmosférica que soporta Madrid.

Respecto a las infracciones por ruidos emitidos por vehículos, industrias o establecimientos de ocio, la cifra se ha reducido en un 13% (de 2.209 sanciones, se ha bajado a 1.919).

En cuanto a las sanciones por ensuciar las calles, repartir propaganda, verter basuras fuera de los contenedores o no recoger los excrementos caninos, se han reducido en 2004 en un 40% (en 2003 se impusieron 11.219, y en 2004 6.717).

Por su parte, en cuanto a las talas ilegales de árboles, el vandalismo y otras infracciones en materia de zonas verdes la reducción del número de sanciones ha sido del 36%.

Santín ha pedido que el gobierno municipal duplique la plantilla de la Patrulla Verde, que actualmente cuenta sólo con 89 agentes y tiene su plantilla congelada desde hace dos años; también que ésta mantenga un número estable de efectivos durante las noches y fines de semana.