González Bedoya que desde hace varios años mantiene una fuerte pugna con la dirección regional del PSOE en Cantabria, calificó su exclusión del acto como "una nueva demostración de la torpeza e intransigencia de algunos dirigentes regionales, que piensan que el partido es un regimiento prusiano".

La orden de prohibir la presencia del ex senador socialista en la jornada de debate fue dada, según publica hoy "El Diario Montañés", por la secretaria de Organización del PSC, Rosa Inés García.

La inscripción de Gonzáez Bedoya fue solicitada por la agrupación socialista de la comarca de Liébana, pero en el momento de formalizar su credencial en la sede del PSOE en Santander comprobó que se había ordenado anular su nombre de la lista de asistentes.

Esta no es la primera vez que la dirección del PSOE en Cantabria veta la presencia de González Bedoya a un acto del partido. Durante una cena-mitin ofrecida por Alfonso Guerra en la localidad de Torrelavega, el ex senador sufrió la misma prohibición.

Los problemas d González Bedoya con la dirección del PSC comenzaron a raiz de la moción de censura presentada contra Juan Hormaechea y que llevó a la presidencia de la región al secretario regional del partido, Jaime Blanco.

Según González Bedoya, "desde la imparable moción de censura contra Hormaechea he soportado con paciencia y disciplina las mentiras y obsesiones de algunos dirigentes que, como si tuvieran los ojos en el cogote, no saben más que mirar hacia atrás con ira, recelos y persecuciones absurdas. Sabía ue Blanco me tenía miedo, pero no tanto".

El ex senador socialista señaló que "cuantas más barbaridades hagan, más imparable será la renovación de modos y estilo, de talantes y talentos, en el interior de nuestro partido".

González Bedoya aseguró que en Cantabria no se habla de renovación sino de regeneración, "porque hay que limpiar muchas actuaciones inmorales que algunos compañeros están llevando a cabo".

Asimismo, afirmó que "la afición de Jaime Blanco y su secretaria de Organización porlos silencios y su manera torcida y caprichosa de ejercer el poder necesitan una regeneración a fondo, una limpieza de modos y formas que nos permitan recuperar prestigio y fama y, más tarde, la confianza de los ciudadanos".