El sobrino de Grimau, que es abgado, alude en su escrito, aunque sin citarla expresamente, a la situación que atraviesa actualmente el jefe del Ejecutivo en relación con el "caso GAL" y señala que la opinión pública debe ser informada con la máxima objetividad posible, "sin realizar acusaciones que no partan de un procedimiento judicial con todas las garantías".

En este sentido, el sobrino del histórico dirigente comunista, que también se llama Julián Grimau, anima a González a que no se deje vencer por "sas oscuras fuerzas" que queren gobernar España "a través de los más ruines medios de presión".

La carta dice textualmente: "Quiero declarar públicamente mi personal adhesión al presidente del Gobierno, Felipe González, en momentos como los actuales.

"Soy abogado, sobrino de Julián Grimau, y con este escrito quiero dejar constancia de mi repulsa a los 'juicios populares' dirigidos por extrañas 'manos'.

"La opinión pública debe ser informada con la máxima objetividad posible sin realizar 'acusaciones' que no partan de n procedimiento judicial con todas las garantías.

"El -aparente- proceso judicial que llevó durante el franquismo a la ejecución de mi tío se realizó mediante -aparente- campaña de prensa de desprestigio, que desembocó en una -aparente- condena popular de Julián Grimau. Pasado el tiempo se demostró su real inocencia. Pero ¿quién le devuelve su vida?

"Señor presidente González, no debe dejarse vencer por esas oscuras fuerzas que quieren gobernar España, no mediante los votos de los ciudadanos, sin a través de los más ruines medios de presión. Usted representa la soberanía popular; otros sólo representan a unos pocos; aunque, esos sí, estos últimos con mucho poder".

Julián Grimau, nacido en Madrid en 1911, fue elegido miembro del Comité Central del PCE en 1954. Desde 1959 residió clandestinamente en España hasta que fue detenido en 1963.

Acusado entre otros cargos de un delito continuado de rebelión militar, fue condenado a muerte y fusilado en abril de 1963. La versión oficial acerca de usupuesto intento de suicidio durante su detención, así como las condiciones en que fue condenado y muerto, provocaron una oleada dde protestas contra el régimen franquista en todo el mundo.