Al-Hussein recobró la libertad el pasado sábado, después de ser detenida en su casa de la aldea de Al-Otayba, a unos 20 kilómetros al este de Damasco, por agentes de la seguridad del Estado el 31 de julio de 2008.

Según Amnistía Internacional, Al-Hussein no recibió ningún contacto con el mundo exterior durante su detención y las autoridades sirias rehusaron facilitar información del paradero y los motivos del arresto a su familia.

Sin embargo, AI cree que el encarcelamiento de Usra al- Hussein pudo estar relacionado con sus esfuerzos de ésta para comunicarse con una organización internacional con el fin de tener información de su marido, Jehad Diab, prisionero en Guantánamo desde agosto de 2002 al ser consideado "combatiente enemigo" de Estados Unidos.

Por otro lado, Amnistía lamentó que el régimen de incomunicación generalizado en los centros de detención de Siria facilita "la práctica generalizada de la tortura y otros malos tratos" a los sospechosos de pertenecer a grupos islamistas no autorizados.