En rueda de prensa, Jiménez resaltó que esa decisión evidencia la "anorexia democrática" que sufre Comisiones Obreras, y acusó a la dirección del sindicato de utilizar el caso Sintel y la agresión a José María Fidalgo para "ajustar cuentas internas" y "anular"a los sectores que encabezan Rodolfo Benito y Agustín Moreno.

"El expediente no nos importa en absoluto", defendió Jiménez, quien insistió en que su único interés es la recolocación de los más de 1.000 ex empleados de Sintel que están en paro sin que "nadie nos haya ofrecido ofertas de empleo y contratos de trabajo".

El presidente de la Asociación de Trabajadores aseguró que "no es normal pensar que un trabajador con más de 45 años esté dispuesto a rechazar una oferta de empleo", concluyó.

PRUEAS

Jiménez esgrimió, además, varios documentos en los que Comisiones Obreras reconoce que no había recibido ofertas de empleo para los antiguos empleados de Sintel.

En una carta remitida el 18 de marzo de 2002 por el secretario general de la Federación Minerometalúrgica de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, al director de Recursos Humanos de Telefónica, Oscar Maraver, el dirigente sindical le exponía que de cuatro empresas -Seirt, Abentel, Elecnor y Dyctel-, "no consta que hayan enviado comunicación aguna".

Estos datos contrastan con la información facilitada hoy en rueda de prensa por el propio Toxo, quien, con fecha 11 de octubre de 2001, dice que Seirt había enviado 20 ofertas de empleo; Abentel otras 60; y Elecnor, 20 más.

Por todo ello, Adolfo Jiménez acusó al secretario general de la Federación Minerometalúrgica de CCOO de mentir y de ser "absolutamente falsas" sus afirmaciones.