Según fuentes municipales, el plan está integrado por más de 200 personas y más de 70 máquinas y vehículos especiales los que se encargarán de devolver a la normalidad esta zona. Se estima que los trabajos iniciados esta mañana se prolongarán durante al menos 48 horas.

El proceso de trabajo previsto comprende el aordonamiento inicial de la zona a actuar, la desconexión controlada de las tomas irregulares de electricidad y agua, la demolición de las estructuras levantadas, la recogida de los residuos existentes y su traslado progresivo y escalonado al vertedero y el barrido y baldeo de todo el área de actuación.

Una vez retirados los elementos más voluminosos, así como los residuos depositados en los contenedores, se procederá a realizar un barrido mecánico y manual de la zona. Para ello, se utilizarán barredors mecánicas y 5 vehículos de peinado, que eliminarán los restos de las estructuras más pequeñas que puedan haber quedado en la vía pública.

La zona afectada por los trabajo supera los 10.300 metros cuadrados de extensión total, y está previsto retirar más de 600.000 kilogramos de diversos residuos.