En declaraciones a Servimedia, el presidente del comité de empresa de Tabacalera, Jesús Martínez, indicó que si el Gobierno no depone su actitud, convocarán movilizaciones específicas en la compañía, además de las que puedan promoverse a nivel general en todo el sector público contra las privatizaciones.

"De ninguna manera entendemos que se privatice ninguna empresa pública, pero mucho menos Tabacalera, una empresa qu aporta miles y miles de millones de beneficios y de recaudación por impuestos para el Estado. No entendemos que eso se quiera vender al mejor postor", denunció Martínez.

En los mismos términos se mostró José Luis Juste, secretario de Organización de la Federación de Alimentación de UGT, que aseguró a esta agencia que "si el Gobierno sigue para adelante con la privatización sin ningún tipo de control y garantía sobre el empleo, lógicamente tendremos que hacer movilizaciones".

Juste, que denunció ue vender una empresa tan rentable como Tabacalera al precio que se rumorea es "regalarla", indicó que estas movilizaciones se concretarían tras la asamblea de delegados de todo el país convocada por UGT y CCOO para el próximo día 10 en Madrid en defensa de lo público.

DECLARACION CONJUNTA

Los responsables de las federaciones de Alimentación de UGT y CCOO y de las secciones sindicales de ambas centrales en Tabacalera han elaborado una declaración conjunta en la que muestran su total rechazo a la priatización.

La declaración, a la que ha tenido acceso Servimedia, comienza destacando el papel estratégico de las empresas públicas, ya que, afirman las centrales, son las únicas en España que pueden competir con las grandes multinacionales y realizar fuertes inversiones. También resaltan la importancia de sus actividades en el campo de la investigación y el desarrollo y su contribución a la generación de empleo.

En el caso concreto de Tabacalera, destacan los fuertes beneficios que genera esta emresa. En los últimos diez años, aseguran que Tabacalera ha recaudado en impuestos para el Estado casi 3 billones y ha registrado por su actividad industrial unos beneficios de 100.762 millones de pesetas.

Sólo en el último año (1995), según los sindicatos de la compañía, Tabacalera ha aportado a las arcas del Estado 500.923 millones en impuestos. Los beneficios de la compañía ese año superaron los 14.000 millones de pesetas. A ello hay que sumar, además, a su juicio, el componente social de la empresa que da empleo directo a 6.500 trabajadores.

Para UGT y CCOO, el argumento del Gobierno de que con las privatizaciones se incrementará la eficacia de las empresas públicas es falso, así como el de que contribuirán a reducir el déficit, ya que, en su opinión, "el déficit terminará por resurgir cuando ya no haya nada que vender".

"Si se pretende una privatización del 25-30% del accionariado (sumándose al 48% ya privado) como se ha anunciado, ello aportaría unos ingresos de algo más de 60.000 millons de pesetas. Si los beneficios del año anterior han sido de 14.000 millones, bastarían cuatro años para obtener los mismos ingresos sin desprenderse de la titularidad de las acciones", añade la declaración.

Los sindicatos aseguran que las consecuencias que se derivarían de la privatización de Tabacalera serán muy negativas, y consideran "de vital importancia que el Estado mantenga el control de Tabacalera, como único mecanismo de defensa de la industria tabaquera de nuestro país, capaz de contener laofensiva de las grandes multinacionales".

UGT y CCOO están seguros de que la competencia terminaría teniendo el control de Tabacalera, y advierten al Gobierno que está comprobado que, una vez que las multinacionales controlan la empresa, concentran en su país de origen las partes del proceso productivo más rentables y localizan las de menor valor en países con costes laborales bajos, descapitalizando su tejido industrial.

Los sindicatos, que creen que los grandes beneficiarios de las privatizacioes serán las instituciones financieras intermediarias, advierten también al Ejecutivo que con la privatización de empresas tabaqueras en países vecinos, los ingresos por impuestos del tabaco han bajado, mientras han aumentado las ventas de tabaco de esas compañías en las redes del contrabando.