LOS SINDICATOS DE SKF DICEN QUE NO NEGOCIARAN EL CIERRE DE LA FABRICA DE MADRID Y ASEGURAN QUE LA FACTORIA ES VIABLE
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Los representantes del comité de empresa de la fábrica de rodamientos para automoción que SKF tiene en Madrid advirtieron hoy que no negociarán el cierre de l factoría, como pretende la dirección de la empresa, y pidieron que se abra un proceso de discusión para debatir los problemas industriales de la empresa.
En una rueda de prensa ofrecida hoy por los miembros del comité de empresa Pablo Navarro (UGT) y Antonio Sánchez (CCOO) y por el secretario de Relaciones Internacionales de UGT-Metal de Madrid, José Emilio Sánchez, los sindicalistas aseguraron que hay alternativas y que la factoría de SKF de Madrid es viable.
En la última reunión mantenida con l comité de empresa, el pasado día 29, la dirección de SKF, que es propiedad de la firma sueca Aktiebolarget SKF, presentó a los sindicatos un plan de reestructuración de la filial española que supone el cierre de la fábrica de Madrid, en la que trabajan 280 empleados.
Según Sánchez, la empresa alega para cerrar la factoría problemas estructurales y la acumulación de importantes pérdidas por motivos sobre todo financieros, pero se olvida de otros problemas de la fábrica, como la propia estrategia de l firma sueca, que ha asignado a la fábrica de Madrid un producto de baja rentabilidad y ha invertido muy poco en tecnología.
Los miembros del comité de empresa indicaron que los altos costes de fabricación que aduce la dirección para cerrar la fábrica, entre un 10 y un 15 por ciento superiores al coste medio en Europa, "se pueden reducir si la empresa accede a negociar las alternativas que planteamos".
Los sindicalistas cuestionaron el negociador designado por la empresa, el grupo de asesores Calevilla, del que dijeron que "sólo viene a negociar el cierre", y exigieron la apertura de negociaciones con "personas responsables del grupo sueco" para discutir la viabilidad industrial de la empresa. Igualmente, pidieron al Ministerio de Industria que asuma parte de su responsabilidad, porque SKF fue pública hasta 1985.
También expresaron su temor a que detrás de la pretensión de la empresa de cerrar la fábrica de Madrid haya alguna actuación de carácter especulativo, ya que explicaron que la empres tiene unos terrenos de oficinas en Manoteras y otros en la Avenida de Aragón, cerca del Aeropuerto de Barajas, valorados en muchos millones de pesetas.
Los sindicatos temen que la empresa pueda intentar resolver los problemas económicos vendiendo estos terrenos, con lo que "les saldría gratis el cierre de la fábrica y perderíamos una fábrica importante en Madrid".
En el plan alternativo elaborado por los sindicatos, que será presentado a la dirección de SKF en la reunión prevista para el 13 de eero, los sindicatos no se niegan a liquidar algunos activos de la empresa, como los citados terrenos e inmuebles, pero piden que el dinero de la venta se reinvierta en la reconstrucción, reactivación y modernización tecnológica de la empresa.
(SERVIMEDIA)
23 Dic 1993
NLV