En un comunicado de prensa conjunto, las centrales señalan que "debido a esta falta de definición en la legislación, en la que el acoso no se considera más que de forma implícita y fragmentaria, en la práctica muchos infractores quedan impunes, sancionándose tan sólo casos graves y aislados".

A su juicio, "para proteger de forma eficaz la dignidad de los trabajadores en el lugar de trabajo, y lograr un entorno laboral seguro, no basta con el endurecimiento de penas o la inclusión del acoso amiental -entre compañeros- en la legislación, medidas éstas propuestas por la Administración. Es imprescindible, además, recoger en la legislación laboral la definición del acoso y su regulación específica".