Las iregularidades son cometidas, según los delegados de Acción Sindical de UGT y CCOO, aprovechando que esas personas llegan al país como mano de obra barata y que se ven obligadas a aceptar trabajo sin condiciones.

Los portugueses y marroquíes que buscan trabajo en Huelva lo encuentran fundamentalmente en la campaña de recolección de la fresa. Los sindicatos aseguran que algunos empresarios no dan de alta en la Seguridad Social a estos empleados, mientras que otros incumplen lo pactado a la hora de pagar os salarios y fijar los horarios.

La proliferación de esas irregularidades, que los sindicatos denuncian de modo reiterado ante las autoridades competentes, ha sido facilitada en parte por la supresión de las fronteras para trabajadores en países de la CE, según las centrales.

Aunque en un principio los sindicatos llegaron a temer una avalancha de ciudadanos de Portugal en la provincia de Huelva, debido a su proximidad, la eliminación fronteriza que el pasado 1 de enero cumplió un año sólo ha oriinado hasta la fecha que en determinadas campañas, como la de la recolección de la fresa, se detecte un "ligero" incremento de trabajadores de estos países en relación a las cifras de años anteriores.

Para UGT, la afluencia de ciudadanos portugueses también se ha notado, además de en el sector agrícola, en la construcción. A juicio de los responsables sindicales de la provincia, la solución para erradicar las irregularidades es intensificar la inspección laboral.

CCOO estima que esas irregularidaes son "normales" para un alto número de empresarios agrícolas, por lo que la central continuará investigando los posibles casos de fraude.