La convocatoria, que afecta a los más de 4.000 trabajadores empleados en los 85 paradores nacionales, incluye también una manifestación de protesta a celebrar el 30 de abril en Madrid.

Las centrales piden también una subida salarial del 8 por ciento, el cómputo de la media hora de comida como trabajo efectivo, 35 días de vacaciones, un plus para jornada partida, mejoras en las excedencas por maternidad y la supresión de los contratos temporales de fomento del empleo.

Además, los sindicatos acusan a la Sociedad Estatal "Paradores de Turismo" de intentar congelar los pluses de antigüedad de los trabajadores. Según las centrales, eso significaría que un empleado con una antigüedad de unos seis años dejaría de cobrar en cinco cerca de un millón de pesetas.

Por otra parte, las Federaciones de Hostelería y Turismo de UGT y CCOO mantienen el compás de espera abierto al término de la uelga general del sector durante el Jueves y el Viernes Santo, antes de decidir nuevas movilizaciones.

Los sindicatos han anunciado que esperarán hasta los primeros días de mayo para lograr la reapertura del diálogo que conduzca a la promulgación de un convenio general del sector que sustituya la ordenanza laboral vigente desde 1944.