Los radicales ameazaron tanto a los pacifistas como a los agentes de la Ertzaintza que garantizaban la seguridad del acto con gritos como "ETA, matalos", "Contra la represión, coche bomba solución", "Los asesinos llevan lazo azul" y "Estas navidades, turrones La Viuda".

Frente a ellos, los pacifistas que exigen la libertad del empresario secuestrado se concentraron detrás de la pancarta "Aldaia Etxeratu Arte (hasta que Aldaya esté en casa). Entre los manifestantes se encontraban Luis Navajas, fiscal jefe de la Audienca Provincial de San Sebastián; Consuelo Ordóñez, hermana del dirigente del PP Gregorio Ordóñez, asesinado por ETA; y trabajadores de Ikusi.

Los pacifistas permanecieron durante 15 minutos en silencio, que finalizaron con un prolongado aplauso, que fue respondido con gritos de "Gora ETA" por parte de los radicales abertzales.

Posteriormente, los radicales de la izquierda abertzale iniciaron una manifestación por las calles de San Sebastián con estas mismas consignas.