No obstante, manifestó que, "si (Esperanza) Aguirre estuviera en lo cierto y ésta fuera una operación política, se hubiera puesto de manifiesto que, una vez más, el Gobierno catalán le ha ganado la baza al de la Comunidad de Madrid y que -la presidenta regional- es incapaz de defender los intereses de nuestra región".

Reiteró que la citada OPA es "una operación empresarial y además no hay ningún compañero de pupitre de la infancia de Zapatero que esté en expectativa de ocupar cargo empresarial alguno en este momento".

Preguntado por la posición que tomarán los representantes socialistas en el Consejo el Administración de Caja Madrid con respecto a esta "operación meramente empresarial", aseguró que el PSM "no da directrices políticas a sus consejeros en Caja Madrid a la hora de ejercer sus funciones", ya que "los que ejercen funciones de dirección sólo defienden los intereses de caja con criterios puramente empresariales".

Informó de que Caja Madrid es "accionista de referencia de Endesa, con un 9%, porcentaje muy distinto al que tiene 'la Caixa' en Gas Natural, más del 30%, por lo que presencia" de la entidad crediticia madrileña es "sustancialmente diferente, cuantitativa y cualitativamente, a la de 'la Caixa'-Repsol en Gas Natural".

"No somos los socialistas en general partidarios de la intromisión política en operaciones empresariales; esto lo ha hecho históricamente otro partido en España y Madrid. Ni Zapatero ni yo tenemos amigos de pupitre que colocar en alguna empresa publica ni privada".

Por último, afirmó que "a los partidos nos corresponde velar para que se cumpla la legislación vigente y no se vulneren los derechos de los consumidores y usuarios", y que "tanto si fructifica como si no, esta operación no tendrá efectos negativos sobre los usuarios de energía eléctrica".