El incendio de la Terra Alta, que comnzó el pasado miércoles en el pueblo de Nonaspe (Zaragoza) y que causó la muerte de cuatro bomberos de la Generalitat, sigue quemando a través de tres frentes: Flix, el barranco de San Francesc y la Pobla de Massaluca, aunque no afecta a ningún núcleo de población.

En los trabajos de extinción de este incendio, que ya ha arrastrado 4.000 hectáreas de bosque, matorrales y cultivos, participan hoy 35 coches de bomberos, dos hidroaviones y tres helicópteros.

En el Coll de Santa Cristina se encuentra desplazados doce vehículos, un avión DC-6 adaptado, dos 'fire-cats' y dos helicópteros. Las llamas, que a primera hora de la tarde de hoy aún avanzaban por cuatro frentes, han quemado unas 200 hectáreas de bosque, según el departamento de Medio Natural de la Generalitat.

El tercer fuego que sigue activo en Tarragona, en Querol, está prácticamente controlado. La superficie calcinada llega a las 50 hectáreas, según las mismas fuentes.

Por otra parte, el jefe de la Brigada de Bomberos de Tarragona,Francesc Riocabo, se encuentra en estado de muerte clínica, según fuentes del Hospital de Bellvitge de Barcelona, donde permanece ingresado desde el pasado 13 de agosto. El helicóptero en el que viajaba el jefe de Bomberos de Tarragona sufrió un accidente cuando acudía a sofocar un incendio en Vandellós.