Según indicaron a Servimedia fuentes diplomáticas, el consulado español en Pekín contactó con "todos ellos" para comprobar su situación una vez que se iniciaron los altercados en la región que enfrenta a miles de hanes (miembros de la etnia mayoritaria de China) y los uigures, a los que culpan del incendio y destrucción de sus comercios en la brutal represión ordenada por Pekín el domingo de esta minoría musulmana.

En concreto, seis de los siete españoles viven al norte de la ciudad de Urumqi, capital de la provincia noroccidental de Xinjinag. Se trata de una zona que está "alejada de los focos de violencia localizados en el centro", según dichas fuentes.

La provincia noroccidental china de Xinjinag está siendo el escenario los últimos tres días de violencia entre miembros de la etnia mayoritaria han y los uigures musulmanes.

Por el momento, el Departamento que dirige Miguel Ángel Moratinos no ha modificado sus recomendaciones de viaje para los españoles que se trasladen a China, si bien las fuentes consultadas señalaron que éstas se actualizan constantemente.