SIERRA NEVADA REPLANTA LAS PISTAS DE ESQUI PARA PALIAR EL DAÑO ECOLOGICO EN EL PARQUE NATURAL
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La empresa Cetursa, que gestiona la estación invernal de Sierra Nevada (Granada), comenzará este próximo luns las labores de revegetación de las pistas de esquí, con el fin de paliar el daño ecológico que supone esa actividad deportiva durante casi 7 meses al año en el parque natural granadino.
Cetursa invertirá, en colaboración con la Universidad de Granada, 28 millones de pesetas para la ejecución de estos trabajos, que comenzarán en la llamada Pista del Río, para continuar en sentido ascendente hacia el pico del Veleta, hasta completar un total de 117 hectáreas.
La práctica totalidad del área que sepretende revegetar afecta a las pistas de competición que se preparan para el Campeonato del Mundo de Esquí Alpino "Sierra Nevada 95".
La empresa pública que financia las infraestructuras con vistas al evento deportivo, Sogefinsa, ha aportado parte de los fondos destinados a la revegetación, indicaron a Servimedia fuentes de la estación.
Las labores de replantación de las pistas con especies autóctonas eran "absolutamente necesarias", dijeron las mismas fuentes, después del impacto ambiental prodcido en la zona por las obras de adecuación de las pistas a las normas de competición de la Federación Internacional de Esquí (FIS).
Sin embargo, a juicio de Cetursa, el impacto "siempre es reversible o, como poco, atenuable mediante la adopción de una serie de medidas correctoras".
Por ello, cada una de dichas actuaciones es sometida a una evaluación de impacto ambiental, de la que se derivan una serie de medidas correctoras a aplicar para proteger el medio intervenido. De esas medidas correctors encaminadas a la regeneración del medio, la principal actuación es la regeneración de la cubierta vegetal que existía originalmente.
Ya desde 1986 se realizan de forma puntual y experimental tareas de recuperación de aquellas zonas que más lo necesitan. Así, en el lecho de las pistas se está restaurando el pastizal, constituido por gramíneas y otras especies autóctonas, de las que han sido seleccionadas por su poder colonizador la "festuca indigesta", conocida como rompebarrigas, y la "dactylis glomrata", en su subespecie juncinella.
Además, dada la pobreza del suelo en las zonas intervenidas, se utiliza también el centeno, que además de consolidar el suelo incrementa su contenido en materia orgánica y no contamina las especies existentes por ser una especie híbrida.
(SERVIMEDIA)
25 Jun 1993
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