Estas inversiones se inscriben en el Plan Nacional para el Salvamento Marítimo que gestiona la sociedad estatal, y que cuenta con un presupuesto hasta 1997 de 47.000 millones de pesetas para ofrecer a las flotas mercantes, pesqueras y de recreo uno de los sistemas de control más modernos de la Unión Europea.

El último conrato para Tarifa debe tener capacidad para gestionar el tráfico en uno de los puntos claves del tráfico marítimo de Europa, con un flujo de unos 200.000 barcos al año, que convierten este área en una de las más peligrosas.

Además, se trata de instalaciones que están operativas las 24 horas del día durante todo el año, lo que en el caso del Estrecho permitió realizar durante el año pasado 312 intervenciones a embarcaciones en peligro y salvar 668 vidas.

Estos equipamientos cuentan con tecnología d radiodetección, vigilancia costera y radiodiagnóstico que detectan los movimientos de embarcaciones en una cobertura de 30 millas, al tiempo que facilita las comunicaciones a embarcaciones con una cobertura de al menos 100 millas. Su entrada en vigor está prevista para 1996.

Los equipos contratados por Salvamento Marítimo a Siemens están siendo ya utilizados en puertos importantes como el de Copenhague, Dover, Harwich o Kuwait.