Según trasladó la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), entre abril y junio de este año perdió 446 millones, por encima de los 314 millones del mismo periodo del año anterior.

La compañía explicó que durante los nueve meses de su año fiscal el resultado se vio afectado por el lanzamiento de la plataforma Siemens Gamesa 5.X y por las condiciones de la cadena de suministro: inflación de los costes energéticos, de materias primas y logísticos, indisponibilidad de componentes clave de los aerogeneradores, congestiones portuarias, y retrasos en el suministro, con impacto en la actividad de fabricación, ejecución y entrega de proyectos.

Adicionalmente a estos factores, en el tercer trimestre (entre abril y junio) el desempeño del grupo se vio impactado por costes ligados principalmente a fallos y reparaciones en componentes de plataformas ‘onshore’ ya establecidas en el mercado y que se estiman en 113 millones.

Por ello, Siemens Gamesa comunicó que ha empeorado su objetivo de margen EBIT previo PPA y antes de costes de integración y reestructuración para el año fiscal 2022 a -5,5% (el objetivo anterior era -4%). Mientras, la compañía mantiene su objetivo de alcanzar un crecimiento de ventas en la parte inferior del rango anterior de entre -2% y -9%.

No obstante, precisó que “el contexto actual continúa ofreciendo un nivel elevado de incertidumbre, tanto por las disrupciones en la cadena de suministro como por las tensiones geopolíticas y el deterioro macroeconómico, que pueden influir tanto en el desempeño del Grupo durante el cuatro trimestre como en la evaluación futura de la cartera de pedidos”.

En los primeros nueve meses del año fiscal 2022, Siemens Gamesa reportó unas ventas de 6.442 millones de euros, un 12% menos que en el año anterior. Las ventas del segmento de aerogeneradores bajaron un 17% en el periodo, hasta los 4.967 millones, mientras que las ventas de servicios subieron un 9%, hasta 1.475 millones.

El EBIT previo PPA y costes de integración y reestructuración fueron de 957 millones de euros, equivalente a un margen EBIT negativo del 14,8%.

Entre abril y junio, la compañía firmó pedidos por valor de 3.523 millones de euros, frente a los 1.520 millones de hace un año.

A 30 de junio de 2022, la posición de deuda financiera neta ascendió a 2.275 millones de euros, frente a la deuda de 838 millones de un año antes.