SIDA. FASE PIDE QUE NO SE CAIGA EN EL TRIUNFALISMO A PESAR DEL NOTABLE DESCENSO DE CASOS DE SIDA

MADRID
SERVIMEDIA

El secretario general de la Fundación Antisida de España (FASE), Héctor Anabitarte, mostró hoy su satisfacción por los daos presentados ayer por el Ministerio de Sanidad acerca de la disminución de casos de sida en España, si bien advirtió que "no se puede caer en el triunfalismo porque muchas personas siguen infectándose hoy en día".

Anabitarte declaró a Servimedia que, aunque desde el punto de vista médico la euforia de las autoridades sanitarias y de los enfermos está justificada y es comprensible, "hay que replantearse muchas cosas porque, si no, podemos caer en una especie de autocomplacencia que nos va a perjudica".

Añadió que en España hay unas 200.000 personas infectadas por el virus del sida, de las que sólo 25.000 están clasificadas como casos de sida por el Ministerio de Sanidad y otras 25.000 que han fallecido, y advirtió que "hay que hablar con otro lenguaje porque de lo contrariopodemos caer en la idea de que la pandemia está controlada".

A su juicio, hablar hoy de casos de sida con la definición de la década de los 80 "no es operativo porque no refleja la situación real. Eso es los que el miniserio debería puntualizar", señaló.

En este sentido, el secretario general de FASE pidió al ministerio que los servicios de epidemiología de cada comunidad no solamente transmitan la información de los casos sino de cuántas personas que se van haciendo la prueba dan positivo, las edades y el origen de la infección.

"Entonces descubriremos que el mapa de la pandemia de los 90 es muy diferente al de los 80 y nos llevaremos la desagradable sorpresa de que está aumentando especialmente en mujeres y envarones, con prácticas heterosexuales sin protección. Esto nos permitiría tener un mapa más real de la situación", dijo.

Según Anabitarte, es paradójico que una persona que está recibiendo triple terapia, oficialmente no sea considerada como caso de sida sino un seropositivo asintomático. Lo mismo ocurre con un enfermo que dos años atrás era terminal y ahora, gracias a los nuevos tratamientos, formalmente es seropositivo.

"Nos estamos autoengañando", recalcó, "y eso hay que modificarlo, porque esuna gran confusión que hay que resolver para saber realmente a qué nos enfrentamos".

(SERVIMEDIA)
12 Mayo 1998
S