Sevilla, que tuvo que escuchar a lo largo de la marcha las críticas de los asistentes contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el Comisionado para las Víctimas, Gregorio Peces-Barba, defendió que los pasos para evitar que terroristas con centenares de años de condena salgan a la calle sin haber cumplido ni siquiera 20 se están dando en los últimos días.

"Los objetivos que se estaban persiguiendo: que no haya salidas de la cárcel de terroristas antes de tiempo, se están consiguiendo justo estos días", sostuvo el ministro.

Hay "mucha indignación justificada contra el terrorismo", opinó Sevilla, pero esta marcha "debería ser motivo de alegría y de orgullo de todos los demócratas y de todos los que estamos contra el terrorismo".

A su juicio, "deberíamos dejar aquello que nos divide en un segundo plano y estar todos unidos contra el terrorismo". Ese debía haber sido el mensaje principal del día de hoy, agregó, "también se ha escuchado en las calles de Madrid y yo me quedo con esto".