El conflicto comenzó cuando los pescadores emprendieron acciones judiciales contra Jesús Casas, como máximo responsable de Doñana, a causa de la colocación de una empalizada en la laya onubense de Matalascañas.

El biólogo y director del parque manifestó que no ha recibido "comunicación formal" sobre su procesamiento por la querella que le acusa, entre otras cosas, de "incitar a la detención ilegal", presentada hace dos años por Angel Boix, portavoz del colectivo de pescadores.

"No niego que mi procesamiento se haya producido, pero hasta el momento no he recibido notificación ninguna por ello", afirmó Casas.

Sobre la colocación de una valla en la zona marítimo-terrestr de Doñana, que impide el acceso en vehículos a motor de personas no autorizadas, los pescadores deportivos sostienen que "es una medida ilegal, pues su único objetivo es privatizar la zona de playa a la que acuden Felipe González y su familia".

Sin embargo, Jesús Casas afirmó que "se trata de una medida encaminada a controlar el acceso de vehículos al lugar donde comienza el parque, aunque hay personas que si justifican su entrada están autorizadas a transitar por la zona".

El enfrentamiento ente el director del parque y los pescadores ha generado numerosas denuncias judiciales en uno y otro sentido, mientras los pescadores de la zona han acudido a distintos departamentos de la Administración para protestar por la instalación de la empalizada.

El ginecólogo Angel Boix acusa al director de Doñana de "obstaculizar el tradicional uso que agricultores, ganaderos, cazadores y pescadores han dado a algunas zonas de la reserva o sus proximidades".

"En algunos pueblos ya se oye el rechinar de dentes de muchas personas que sienten odio hacia el director del parque, que con su actitud está provocando el enfrentamiento continuo de una comarca", indicó Boix.

Por último, denunció la autorización de la dirección para abrir un camino en una zona de máxima protección del parque que da acceso a la playa de Matalascañas, "con la única finalidad", según Boix, "de que Felipe González no dé la cara tras ser informado de la problemática por nosotros mismos".