Guerra habría pronunciado esta y tras frases sobre miembros del Gobierno y de la llamada "beautiful people" en el transcurso del almuerzo-tertulia que celebró con diez altos cargos socialistas en el Ayuntamiento, el Gobierno regional y la Federación Socialista Madrileña; una comida más de las que mensualmente organizan el ex alcalde de Madrid Juan Barranco y sus "cruzados", nombre por el que se conoce a los fijos en estos encuentros, y a la que siempre acude un invitado.

Entre plato y plato (callos, boquerones en vinagre, embutido y enguado o chuletillas de cordero, dice el rotativo que degustaron), Barranco y sus "cruzados" escucharon al ex vicepresidente del Gobierno algunas teorías sobre la actualidad política.

La primera es que Solchaga sería supuestamente el cabeza de puente de una conspiración neoliberal que patrocinarían el Banco Bilbao-Vizcaya (BBV), el grupo editorial Prisa (editora de "El País") y otros miembros de la "beautiful people"; los mismos que, en opinión de Guerra, tienen "secuestrado" a Felipe González, al qu han convencido de que el Gobierno "tiene que funcionar como un consejo de administración".

"No podemos decir que no estén contentos con el PSOE, porque se están poniendo `moraos'", fue una de las frases que les dedicó Alfonso Guerra según "El Mundo".

Prueba de la connivencia de Solchaga con este sector económico, explicó a sus contertulios, es que sólo uno de los 36 altos cargos del Ministerio de Economía y Hacienda (incluido el gobernador del Banco de España, Mariano Rubio) es del PSOE.

"E BBV tiene a dos representantes en el Gobierno", concluyó Guerra al respecto, aludiendo a la condición de ex trabajadores de la entidad bancaria de Solchaga y el ministro de Industria, Claudio Aranzadi.

De Aranzadi añadió: "Uno no se puede fiar de los chicos que pasan de la LCR (Liga Comunista Revolucionaria) al BBV".

La comida se celebró el 23 de octubre, fecha de la huelga general en Asturias. A este respecto, Guerra censuró a Solchaga por haber dejado en mal lugar al ministro de Trabajo y secrtario general del PSOE asturiano, Luis Nartínez Noval, al obstinarse en la inviabilidad económica de empresas mineras como Hunosa, que puede dejar en la calle a miles de asturianos.

"En un país también hay problemas sociales que tienen que ser atendidos no sólo fijándose en la cuenta de resultados económicos", afirma "El Mundo" que dijo Guerra.

El editor de "El País", Jesús Polanco, también fue objeto de sus críticas. "¿Cómo se explica que un señor que defiende la libertad de expresión pida el seuestro de un libro?", preguntó a los comensales, en alusión al libelo financiado con dinero del narcotráfico en el que se lanzan graves acusaciones contra personajes públicos, entre ellos Polanco.

APOYO DE SERRA

Por su parte, el sucesor de Guerra en la vicepresidencia del Gobierno, Narcís Serra, ha aprovechado esta coyuntura para tomar iniciativa política. El secretario general de la Federación Socialista Madrileña, Teófilo Serrano, antiguo "guerrista", al que Guerra acusa ahora de traicionarle, desyunó el pasado jueves con Serra en el Palacio de La Moncloa para buscar el apoyo de éste.

Según publica hoy el diario "El País", Serra empieza a tomar la iniciativa que tenía Guerra en este tipo de reuniones, con las que pretende ejercer efectivamente el papel de coordinador entre PSOE y Gobierno.

Ayer mismo, la agrupación del PSOE en el pueblo madrileño de Valdemoro emitió una nota informativa en la que critica "la obcecación de Alfonso Guerra en su enfrentamiento con Felipe González y el conjuno del partido, poniendo en peligro su férrea unidad".