Según los cálculos de la patronal Asaja, la sequía ha afectado principalmente al cereal de secano y a la remolacha, con pédidas de unos 20.000 y 3.600 millones de pesetas, respectivamente, a lo que hay que unir el gasto adicional realizado por las explotaciones de ganadería extensiva para sustituir los inexistentes pastos por piensos y forrajes almacenados.

Por su parte, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) en Andalucía considera que las pérdidas globales ascienden a 31.000 millones de pesetas y pide que, si se inician los cortes de agua, afecten por igual a los agricultores, las poblaciones y otro tipo de actividadesdeportivas, como los campos de golf.

Finalmente, ambas asociaciones agrarias piden al Gobierno que adopte urgentemente las medidas necesarias para paliar la situación por la que atraviesan algunas explotaciones agrarias y ganaderas andaluzas y que solicitan a la Comisión Europea ayudas económicas para los afectados por esta sequía, que se une a la ya sufrida en esta zona el año pasado.