La compradora invertirá 135 millones de euros (22.500 millones de pesetas) en los próximos cinco años con el fin de relanzar la compañía española, que facturaba 77,5 millones de euros (12.900 millones de pesetas) y "estaba en déficit constante". Además, desvincula al Estado de una activdad sumida en pleno proceso de reestructuración internacional, que ha costado 1.007,8 millones de euros (167.688 millones de pesetas) desde 1983.

Con este nuevo plan industrial, BBAG prevé multiplicar por 3,5 la facturación de la compañía, hasta alcanzar los 252,4 millones de euros (42.000 millones de pesetas) y llegar al 25% del mercado nacional.

Asimismo, la empresa alemana estima que, con la inversión prevista, su nueva adquisición alcance resultados positivos en el tercer ejercicio, con un beeficio neto de un millón de euros (166,3 millones de pesetas) y en el quinto ejercicio los 4 millones de euros (665,5 millones de pesetas).

Además, el plan industrial también incluye un plan de empleo en el que asegura la estabilidad laboral de los 673 trabajadores durante los próximos cinco años como mínimo.

Por otra parte, el presidente de BBAG, Klaus G. Lederer, manifestó hoy, tras la firma del acuerdo celebrado en Madrid, que en el futuro construirán generadores para centrales eléctricas y gaísticas y aseguró que con esta adquisición no se acaban las relaciones con la SEPI, puesto que en los próximos meses, "podremos tener algún contacto" en asuntos navales.

En concreto, Lederer se refirió a posibles acuerdos entre BBAG e IZAR, la empresa que pertenece a la SEPI fruto de la fusión entre Astilleros Españoles y Bazán.

El presidente de la SEPI, Ignacio Ruíz-Jarabo, aseguró que la firma "es una buena noticia para todos los implicados" y destacó la importancia para la supervivencia de la mpresa española de las inversiones previstas.

Finalmente, el proyecto de BBAG contempla el cierre de sus instalaciones de gasificación de carbón en Berlín y las ha trasladado a su fábrica de Galindo, en Bilbao.

De esta forma, tres naves de Babcock Wilcox España, de más de 4.000 metros cuadrados, cuantan hoy con una tecnología capaz de fabricar los principales componentes de una instalación de gasificación de carbón.