Según la organización, los plásticos cada vez quitan más territorio a buena parte del sulo andaluz y la progresiva instalación de invernaderos está creciendo como una epidemia en el sur de España.

"Esta proliferación descontrolada resulta muy preocupante, no sólo por el impacto visual, sino por la cantidad de residuos que genera (toneladas de plásticos no reciclables, agroquímicos contaminantes). Pero el problema se agrava, ya que ahora los invernaderos están colonizando los espacios protegidos", afirma SEO/BirdLife en un comunicado.

El Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar es uno delos espacios amenazados, ya que los invernaderos ilegales están proliferando impunemente, vulnerando la legislación. SEO/BirdLife ha lamentado la "pasividad" de la Junta de Andalucía ante estos hechos y ha denunciado la construcción de un nuevo invernadero entre Fernán Pérez y Aguamarga, en el paraje denominado "Los Cortijillos".

A finales de junio, la organización ecologista tuvo conocimiento de que se estaban terminando las obras de acondicionamiento de este invernadero, dentro de los límites del Paque Natural de Cabo de Gata-Níjar, sin contar con la preceptiva licencia de instalación.

Ante ello, solicitó a la Consejería de Medio Ambiente que paralizara las obras y abriera un expediente de denuncia contra el responsable, pero hasta el momento la Junta de Andalucía ha hecho "la vista gorda". A juicio de SEO/BirdLife, hay legislación más que suficiente para castigar esta violación de un espacio protegido.