Según el promotor de la proposición, Juan Antonio Arévalo, "los distintos y complejos efectos que se derivan de la transexualidad, unido a la necesidad de fijar los requisitos para acceder al cambio registral de sexo y de proteger los derechos de terceras personas, aconsejan la existencia de una ley que regule los aspectos juídicos de la transexualidad".

Arévalo indicó que esta es la primera vez que en España se presenta una proposición de ley de esta naturaleza, ya que otras iniciativas que en torno a este tema se han visto en el Parlamento andaluz y en el Congreso de los Diputados se referían a la gratuidad, a cargo de la Seguridad Social, del tratamiento médico que precisan los transexuales.

La proposición de ley pretende reconocer el derecho individual a la dignidad personal de los transexuales, problema que, segn el PSOE, adquiere en muchas ocasiones categoría de drama, dado que se trata de personas que se sienten y mueven de forma no coincidente al sexo con el que han nacido.

En caso de que la propuesta socialista alcanzara rango de ley, los transexuales adquirirían todos los derechos inherentes a su nueva condición, incluso el cambio en el Registro Civil tanto de nombre como de sexo.