Semprún dijo que el PSOE "va a un congreso que debería ser de reflexión y análisis sobre el pasado y de tentativa de explicación a si mismo y al país por qué han pasado tantas cosas, por ejemplo lo de Roldán, o por qué hubo esta corrupción que no se puede achacar a seis invergüenzas infiltrados".

A su juicio, "lo que se nota son batallas de aparato, si estará fulano o no estará mengano, cuántos compondrán la Ejecutiva, si será manejable o no para el secretario general. No veo la reflexión, aunque puede que de aquí a junio salga un documento impresionante y lúcido que nos explique por qué (ocurrió) el GAL, por ejemplo, pero no parece que sea ése el camino".

En relación con la polémica de la televisión digital, Semprún criticó duramente la actuación del Gobierno, l que acusó de intentar perjudicar a la plataforma liderada por el grupo Prisa y señaló que lo único que se sabe de su competidora es que "dispone ya de un catálogo de culebrones de Televisa. Es lo único que tiene".

Semprún atribuyó la política del Gobierno a "una duda o vapor calenturiento" del secretario de Estado de Comunicación, Miguel Angel Rodríguez, o del vicepresidente primero, Francisco Alvarez Cascos.

En su opinión, "a alguna gente de este Gobierno le está pasando exactamente lo que le asaba a Alfonso Guerra en cuanto a la obsesión y al control de los medios de comunicación". Añadió que "los políticos deberían abandonar la idea de que para ganar las elecciones hay que controlar la televisión o la radio".