LOS SEMANARIOS CONVIERTEN LOS VIAJES DEL REY A SUIZA EN CUESTION INFORMATIVA DE PRIMERA MAGNITUID

MADRID
SERVIMEDIA

Las revistas de información general convierten los recientes viajes privados del rey don Juan Carlos I a Suiza, en cuestión informativa de primera magniud, en sus números de esta semana.

"La escapada del rey" es el titular de portada elegido por "Tiempo" para su portada de esta semana, mientras "Tribuna" llama la atención de los lectores con un "Lo que hizo el rey en Suiza" y "Epoca" va algo más allá sin abandonar la ambigüedad, con un "El difícil papel de la reina", que ofrece en su interior un relato cronológico pormenorizado de los comentarios y rumores que circularon por España la semana pasada en torno a la familia real.

"Nunca nadie se haba atrevido a tanto. Nunca se había hablado del Rey tan alto y desde tan alto", dicen textualmente los responsables de "Epoca" en la entradilla de su reportaje principal de esta semana.

Quienes la semana pasada encendieron las brasas del escándalo -continúa ese mismo semanario- no eran ni advenedizos ni desaprensivos. Quince años después de la reinstaruación de la monarquia en nuestro país, habían de ser sus propios "voceros", sus plumas más amables, quienes ventilaran a la luz pública sus más compromeidos secretos.

En el plazo de una semana, añaden los comentaristas de "Epoca", la letra de imprenta y las ondas radiofónicas difundieron más intimidades de la Casa Realespañola que en estos úiltimos tres lustros. Algo bulle en la Zarzuela. Pero la verdad todavía no ha trascendido"

Una de las frases del reportaje de "Epoca", que no aparece destacada ni en sumarios ni en pies de foto, dice así: "Para esta revista, no es nuevo que el Monarca guste hacer sus escapadas de fin de semana, a Mallorca mchas veces, donde ciertamente tiene amigos... Del mismo modo que sabe que ninguna dama de lance ha viajado de Mallorca a Suiza en las pasadas semanas".

Incluye "Epoca" en su informe la reproducción textual de unas declaraciones del periodista Jaime Peñafiel en el programa vespertino de Encarna Sánchez en la cadena Cope, en las que dijo entre otras cosas lo siguiente:

"Se trata de una crisis grave que procede de atrás. El Rey está pasando por una situación mala... El Rey es un profesional, pero enestos momentos es más que Rey, un ser humano que está viviendo un problema matrimonial viejo que ha entrado en crisis ahora y que hay que dejar que supere solo".

El reportaje de "Epoca", firmado por Carmen Remírez de Ganuza, termina con la siguiente frase en la página 20: "Sea como sea, la Casa Real española ha dejado de ser materia reservada. Se quiera o no, y sean cuales sean las razones, los avatares de la monarquía británica han influido de manera notable en la propia Casa Real española. Aunque la aguas vuelvan a su cauce, ya nada será lo mismo."

En la revista "Tiempo" lo más destacado es el titular: "La escapada del Rey", pero la información , con amplio despliegue gráfico y sumarios destacados, no pasa de ser una reseña que no aporta datos nuevos ni hace alusión alguna a las insinuaciones reflejadas en "Epoca".

Los informadores de "Tiempo" incluyen, a dos columnas, en la última página del reportaje, un sondeo cuyas conclusiones titulan del siguiente modo: "Dos de cada tres españoles crenque el Rey no tiene que dar cuenta a nadie de sus viajes".

"Tribuna", sin embargo, sí aporta información sobre la materia y los periodistas A. Torres y M. Jiménez, enviados especiales a Saint Moritz, aseguran que fue en esa ciudad suiza donde don Juan Carlos pasó sus polémicos días de descanso.

Según "Tribuna", el rey se desplazó a Saint Moritz el 15 de junio con un amigo aristócrata llamado Zourab Tchkotoua, de origen georgiano, para "ponerse en manos de Günther Traub, un deportista poseedor de umerosos títulos de ciclismo... Para don Juan Carlos no era una experiencia nueva, pues no ha sido la primera vez que acude a los servicios de su ya amigo Günther Traub para mantener una buena forma física".

El reportaje incluye una foto del Rey y sus amigos tras sus bicicletas "en una de sus anteriores visitas" a Suiza y otra con Günther Traub, "en plena sesión de entrenamiento".

Los reporteros de "Tribuna" matizan que "solamente el empleado de recepción del hotel Carlton confirmó... la presenciadel Rey de España en Saint Moritz. Asimismo, lo reconoció un taxista de ese pueblo, para advertir a continuación que no espere que alguien se lo confirme, porque no lo van a hacer"

(SERVIMEDIA)
29 Jun 1992
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