El concurso, dirigido a jóvenes de entre 14 y 18 años tanto de dentro como de fuera del ámbito escolar, ha contado con equipos formados por miembros con y sin discapacidad encargados de diseñar un proyecto con impacto social positivo en su entorno.

En concreto los proyectos finalistas son los de los equipos ‘Pedraza’, del IES Francisca de Pedraza, el ‘PPE y FP’, del IES Pablo Neruda, y los ‘Calderones’, del IES Calderón de la Barca, todos ellos de Madrid; el equipo ‘EVG’ de la Escuela Virgen de Guadalupe de Badajoz, y el equipo ‘Influencer’ del IES Alvarez Cubero de Córdoba.

También han sido seleccionados el equipo ‘Supermakers’, impulsado por la Fundación Rafa Puede de Murcia; ‘Camaleones’, del colegio Virgen del Pilar Educación Especial de Cádiz; ‘Cook 4You’ de IESO Publio López Mondéjar, de Cuenca; el equipo ‘Rey Ardid’ de la Fundación Ramón Rey Ardid de Zaragoza, y el equipo ‘Neul’ de EPLA Escuelas Profesionales Luis Amigó de Valencia.

Todos estos equipos han tenido que trabajar competencias muy valoradas en el siglo XXI, tales como la digitalización, el liderazgo, el emprendimiento, la creatividad, el trabajo en equipo, la toma de decisiones y los conocimientos financieros, entre otras.

El concurso constaba de dos fases. En la primera de ellas, los 59 equipos participantes, entre cuyos componentes debía haber al menos dos personas con discapacidad, presentaron un proyecto de impacto social en su entorno dentro de una plantilla CANVAS facilitada por la organización.

En esta plantilla, los participantes tenían que informar sobre el objeto de su startup, el problema al que hacía frente, el público al que se dirigía y el impacto social que se perseguía.

De entre los presentados, un jurado formado por representantes de Fundación ONCE y Fundación Citi, además de por expertos en emprendimiento, seleccionaron a un total de 25 equipos. Para ello, tuvieron en cuenta criterios como la creatividad e innovación, el propio impacto social generado, la accesibilidad e inclusión y la oportunidad y viabilidad del proyecto.

En la segunda fase, los equipos contaron con al menos tres integrantes con discapacidad y presentaron un dossier más desarrollado de su proyecto de impacto social. Así, detallaron aspectos tales como presupuesto, necesidades, tareas y modo de ejecución, entre otros. Además, tuvieron que rellenar una ficha describiendo las denominadas habilidades blandas de los integrantes del grupo.

De los finalistas, el Jurado elegirá a tres ganadores que recibirán un premio de 6.000 euros como capital semilla para poner en marcha su proyecto de impacto social. Además, dentro de cada uno de los equipos ganadores los participantes obtendrán una tarjeta regalo por valor de 100 euros y los tutores serán premiados con un iPad por su involucración y apoyo al proyecto.