Así lo trasladaron este viernes fuentes de Seguridad Social a Servimedia, que explicaron que “los autónomos van a tener que pagar en función de sus ingresos reales, pero van a tener mayores prestaciones sociales”.

Con el nuevo sistema, Seguridad Social calcula que en torno a dos tercios de los trabajadores autónomos observarán una reducción de su cuota mensual. Y, en todo caso, el departamento dirigido por José Luis Escrivá defiende que todos los autónomos verán como las prestaciones sociales mejoran cuando se enfrenten a situaciones como la jubilación, una incapacidad temporal o una baja por maternidad o paternidad.

Por otro lado, el Ministerio pone en valor la “flexibilidad” del sistema de cotizaciones por tramos, ya que permitirá que los autónomos puedan cambiar de cuota hasta seis veces al año, para que estas se adecúen a su situación de cada momento y no se vean perjudicados.

Asimismo, las fuentes ministeriales subrayan que este planteamiento, que podrá ser modificado ya que se va a seguir negociando con las organizaciones de autónomos, responde a los compromisos que se acordaron en la Comisión del Pacto de Toledo para la reforma del sistema de pensiones.

DETALLES DE LA PROPUESTA

La propuesta del Ejecutivo plantea 13 tramos de cotización que comenzarían a tener efecto desde el año próximo, pero de forma escalonada, ya que las subidas y bajadas de cuotas en función de los ingresos irían implementándose gradualmente durante nueve años.

Estos tramos oscilan desde unos rendimientos inferiores a 600 euros, para los que la cuota sería de 281,52 euros en 2023 y se iría reduciendo hasta los 183,60 euros en 2031, y unos rendimientos superiores a 4.050 euros, con una cuota creciente desde los 351,9 euros el año que viene hasta 1.266,66 euros en 2031.

Por otro lado, el planteamiento inicial del Gobierno mantiene la tarifa plana aprobada durante el Gobierno de Mariano Rajoy, es decir, una cuota reducida durante los dos primeros años de actividad, con el fin de incentivar el emprendimiento y ayudar a los autónomos en el inicio de su trayectoria profesional.

La propuesta del Ejecutivo, según fuentes negociadoras, sitúa la cuota de la tarifa plana en el entorno de los 70 euros mensuales, frente a los 60 de la actualidad. No obstante, fuentes de Seguridad Social precisan a Servimedia que la “negociación acaba de empezar” y que es una propuesta inicial.

Una novedad importante de la tarifa plana es que solo podrán beneficiarse de ella aquellos autónomos con ingresos inferiores al SMI que esté vigente en cada momento. El resto se acogerían al tramo correspondiente según sus ingresos.

En la actualidad, y a falta de que el Gobierno negocie con patronal y sindicatos una revalorización de este indicador para este año, el SMI se sitúa en los 965 euros por 14 pagas (13.510 euros anuales).