Esta segunda autopsia fue solicita por el fiscal que instruye el caso y ha sido realizada por tres médicos forenses, que también han determinado que el uso de la fuerza, golpes, sprays de defensa, pueden haber contribuido a desencadenar el propio delirium o incluso asociarse al desarrollo del resultado final, colaborando en menor medida a la causa fundamental, que fue, la reacción adversa a la cocaína.

La resolución de la juez que instruye el caso, Estefanía López, a fecha de 5 de mayo, a la que ha tenido acceso Servimedia, incluye este informe forense en el que se analizan las cuestiones formuladas por el fiscal para esclarecer si se trata de un homicidio.

En el informe se detalla que "una muerte violenta de origen accidental (arritmia fatal como consecuencia de delirium agitado por cocaína), en la que otros factores coadyuvantes (...) pueden haber contribuido a desencadenar el propio delirium o incluso asociarse al desarrollo del resultado final colaborando en menor medida a la causa fundamental (reacción adversa a la cocaína)".

"Se debe partir, continúa el texto, del hecho que la causa de la muerte (agente necesario y suficiente para un efecto) es el consumo de cocaína y de la existencia de concausas (agentes necesarios pero no suficientes de forma individual para producir la muerte) que se asociaron a aquella".