Una cincuentena de personas se reunieron frente al pabellón de Alditrans a la misma hora e la que los trabajadores de la empresa de transporte pedían la libertad para José María Aldaya.

Los concentrados de LAB, entre los que no figuraba ningún miembro significativo del sindicato, portaban una pancarta con la leyenda "Fraude fiscal, corrupción, fondos reservados, desempleo... Verdadero terrorismo social", y otra con el lema "Euskal Herria Askatu" (liberad a Euskal Herria).

Además, corearon gritos en favor de los presos etarras y otros como "los asesinos llevan lazo azul", "vuestros aplusos mataron a Rosa" o "el pueblo no perdonará".

Por su parte, los trabajadores de Alditrans estuvieron acompañados, además de por los hijos menores de Aldaya, por el ex presidente de Euskadiko Ezkerra, Juan María Bandrés; por el presidente de Eusko Alkartasuna en Guipúzcoa, José Julian Irizar; por miembros de la Diputación guipuzcoana y por el director de la televisión vasca (EITB), Iñaki Zarraoa.

Bandrés calificó la concentración de LAB de "espectáculo fascista" y aseguró que "ver a la gente haiendo el ridículo y mostrando su talante fascista siempre es penoso".

El abogado donostiarra desveló que Aldaya fue cliente suyo en los años 80-81 y que sus honorarios habían sido de 1.500 pesetas, pero que éste no era el motivo de su solidaridad con los trabajadores de Alditrans, sino el apoyar a la familia "en un momento duro y difícil".

Bandrés afirmó que el secuestro de Aldaya, "además de ser un crimen es un error", porque sus familiares "no esán en condiciones de pagar esas cantidades que ET suele exigir".

Por su parte, el portavoz de los empleados de Alditrans, Enrique Cercadillo, mostró su sorpresa ante la concentración de LAB frente a los pabellones de la empresa de Aldaya y aseguró que la linea de los trabajadores de Alditrans es "totalmente pacífica y silenciosa" y que "mientras nos respeten aquí estaremos".

Cercadillo volvió a insistir en la falta de inciativas por parte de los partidos políticos en apoyo a Aldaya añgp que, a su juicio, "debieran asumir porque son nuestros repesentantes legales".