"Los que tienen secuestrado a José María Aldaya y han culminado todos los tiros en la nuca que aquí se han disparado en esta última víctima, son espectros que transitaron aquellos tiempos", aseguran.

Además, afirman que "un ciudadano -José María Aldaya- cumple un mes en alguna mazmorra privada porque al parecer no entregó al 'gang' el dinero que le exigían y después de que un sicario de los extorsionadores descerrajara un disparo en a nuca de otro ciudadano -Enrique Nieto-. Este es el último estadillo de víctimas directas en la reserva de caza que ETA ha instalado en Guipúzcoa".

Dirigiéndose a los etarras como "sicarios de este actualizado totalitarismo", la asociación judicial les dice que "la aniquilación de la vida humana y la desertización del País Vasco que provoca el chantaje no tiene justificación ni futuro en el plano de los valores comúnmente aceptados".

Asegura que los demócratas tienen como tarea poner remedio a etos males y agrega que las únicas "armas" en esta lucha "son las leyes justas y la tolerancia".

Finalmente, Jueces por la Democracia se solidariza con todas las víctimas del terror, "porque ellas son testimonio de la libertad y de los derechos individuales y colectivos, y reafirma la necesidad de acabar con el terrorismo con las armas de las leyes democráticas".