Agregó que la banda terrorista "nos está planteando un reto a todos los partidos para que nuestra respuesta sea unitaria y eso es lo que o creo que haremos todos si no estamos locos".

Jáuregui recordó que el impacto del secuestro de José María Aldaya en la economía y en los empresarios es muy grande, ya que puede generarse un temor que lleve al pago del denominado impuesto revolucionario.

"Hay que articular una plataforma de partidos, sindicatos, grupos pacifistas y empresarios, probablemente en la misma localidad, allí en Irún, en Hondarribia, para que desde allí surja todo lo que es la inteligencia y la organización de esa proteta, de esa respuesta y de ese presing social que tiene que hacer la sociedad vasca contra ETA y contra HB", afirmó.