Evangelista, que reside en Albacete, dijo que había decidido denunciar a sus compañeros ante la Guardia Civil porque sentía remordimientos y aseguró que no tiene antecedentes penales ni es confidente policial.

En la entrevista reiteró que, según le habían explicado Bassa y Canals, en el secuestro de la farmacéutica de Olot había participado una tercera persona aunque no conocía su identidad.

Francisco Evangelista había colaborado hasta el pasado verano en una empresa de detectives de Bacelona junto a los dos presuntos implicados en el secuestro y los tres juntos habían montado otra sociedad de venta de teléfonos en la misma ciudad.

Por otra parte, Joan Casals ingresó esta noche en la cárcel Modelo de Barcelona después de que el juez hubiera decretado prisión tras tomarle declaración durante dos horas. Según fuentes judiciales, el acusado podría ser trasladado mañana a la cárcel de Figueres (Gerona), ya que el juez que instruye el caso es el de Olot.

El otro inculpado, Xavier Basa, declaró durante toda la tarde de hoy en el juzgado de Gavà (Barcelona), aunque todavía se desconoce si el juez ha decretado también prisión para él.