El ayuntamiento irunés solicitó además a todos los comercientes y sectores productivos de la villa la colocación de dicho símbolo en sus ropas, así como en sus locales como expresión del "rechazo a la actitud totalitaria de ETA".

Los portavoces del PSE-EE, PNV, EA, PP, EUE y un concejal independiente en el ayuntaminto de Irún, mostraron su solidaridad con la familia y los trabajadores del industrial secuestrado y manifestaron que apoyarán las acciones propuestas por éstos, así como las de cualquier organización social y pacifista que solicite la liberación de Aldaya.

El ayuntamiento condena la violación de los derechos humanos y el ataque frontal que el secuestro supone "para un sector económico clave para el desarrollo del bienestar de Guipúzcoa y, en especial para la comarca del Bidasoa".

Finalmente, solcitaron al resto de los municipios de Guipúzcoa que se adhieran al acuerdo tomado por el consistorio irunés.