El grupo de secuestradores no confirmó que pertenezca al Frente Islámico de Salvación (FIS), pero reclamó también la continuación del proceso electoral abierto en 1991, cuando fueron canceladas las elecciones que había ganado ese partido fundamentalista.

Los raptores dejaron en libertad a las cuatro mujeres que viajaban en el aparato, dos pasajeras y dos auxiliares de vuelo, al tiempo que amenaaron con realizar acciones violentas si sus peticiones no son atendidas.

No se sabe con certeza de que armamento disponen y todo lo que ha trascendido es que tienen varias cajas que podrían estar cargadas con explosivo. Su intención es proseguir rumbo a Marsella, en Francia, una vez que sean concedidas sus peticiones.

Por otra parte, el hombre que tuvo que ser evacuado del avión como consecuencia de un ataque de nervios fue identificado como un ingeniero argelino. Tras ser atendido en el botiquíndel aeropuerto, fue trasladado a una clínica de Palma de Mallorca.