Horno señaló que el dato de ocupación hotelera del mes pasado mes de julio, que según el Instituto Nacional de Estadística (INE), se situó en 73,9 por cien, sólo viene a poner de confirmar las expectativas de la Administración española.

Turespaña prevé que 1997 acabará con un crecimiento de entre el 2 y el 3 por ciento en el contingente de turistas extranjeras que vsitarán España, con lo que se situarán en torno a 43 millones, a pesar del mal tiempo registrado el mes de julio.

Horno destacó que, aunque el turismo español sigue siendo básicamente de sol y playa, se está ampliando la afluencia de visitantes fuera de la temporada alta, con turistas que vienen por razones de negocio o por curiosidad cultural.

Según Horno, el mercado natural de España sigue siendo Europa (sobre todo el mercado británico, el francés y el alemán), pero cada vez es mayor la afluenca de otras zonas, como los Estados Unidos.

El director de Turespaña explicó que alrededor del 60 por ciento de los turistas repiten visita a España, lo que da idea del alto grado de satisfacción que muestran en relación a su estancia en nuestro país.

No obstante, reconoció que, a juzgar por las encuestas que realizan sobre este particular, está surgiendo una preocupación creciente entre los turistas por la preservación del medio ambiente y la reducción del nivel de ruidos. Añadió que en este terrno se han realizado inversiones que contribuirán a mantener la fidelidad de los turistas a sus destinos en España.